En el 21 aniversario de la muerte de Joaquín de Prada González, aún siguen doblando las campanas. Loli de Prada lo puede asegurar. Yo le quería más que a mi vida y lo perdí para siempre…

Por cierto, que esta foto en que está tan guapo con unas rocieras se la hice yo en 1988 durante un viajecito que hicimos a Sevilla. Y en la foto de abajo estamos en el restaurante Espadon del hotel Ritz de Paris, en 1989, cuando ya sabíamos que tenía un cancer, aunque poco podíamos sospechar que nos quedaba tan poco tiempo para disfrutarlo.

Durante la dictadura de Franco íbamos amenudo a Francia a comprar libros prohibidos sobre el franquismo, a veces también se podían comprar en la trastienda de la librería “Cinc d’Oros” de Barcelona…

Joaquín de Prada González, os lo puedo asegurar nos continua queriendo. Era cariñoso y dulce, muy amigo de sus amigos, que fue cultivando allí dónde estuvo: en Salamanca, del mundo del cine y del de la carrera de Derecho y en Cataluña, en el Colegio Notarial, dónde destacó. En fin, que fue siempre muy querido por sus amigos que lo conocieron muy bien, y muestra de ello son estos maravillosos escritos que hemos ido publicando recientemente en el blog.

 

4 Respuestas a “POR QUIEN SIGUEN DOBLANDO LAS CAMPANAS, 21 AÑOS MÁS TARDE…”
  1. Ana Mirasol y Luis Encarnación dice:

    Mi queridísima Loli:

    Ayer tras recibir tu correo entré inmediatamente en tu blog. ¡Qué maravillosa sorpresa! El homenaje y el recuerdo a vuestro inolvidable Joaquín me emocionaron como no puedes imaginar. Desde luego estoy segura de que una persona, a la que desgraciadamente no pude conocer, que tantos años después de su muerte sigue causando estos sentimientos fue sin duda un ser excepcional.

    Luis, que sí lo recuerda muy bien, me dice que era un chico poco hablador, muy educado y amable. Y también quizás un poquito triste. Afortunadamente pronto encontró a la mujer de su vida que supo darle toda la felicidad que merecía. Vivir un amor como el vuestro no es nada frecuente y tal vez (qué mala es la envidia) por ahí te llegaron muchos de tus problemas. Me ha hablado muchas veces del día que os presentó y la foto de aquella verbena ha estado siempre en un viejo álbum en el que guarda las fotos más queridas de su juventud. Por entonces, como sabes, yo era una niña que ni siquiera conocía al que desde hace casi cuarenta y siete años es mi marido. Es una pena que por las circunstancias de sus vidas Joaquín y Luis perdieran el contacto y no volvieran a verse, estoy segura de que hubiéramos sido grandes amigos.

    Cristina, Joaquín, José Manuel, lo que habéis escrito sobre vuestro padre es, con mucho, lo más precioso de un precioso blog.

    Os enviamos como siempre nuestro cariño y profunda amistad

    Luis y Ana

  2. Josefina dice:

    Recuerdo con satisfacción y orgullo a “Don Joaquín”, fue mi primer Notario hará “44 AÑOS”, el día 3 DE FEBRERO DE 1.969″ donde empecé a trabajar en su Notaria de L’Hospitalet de Llobregat, con apenas 17 años a punto de cumplir los 18, necesitaba una “mecanógrafa” como se decía en aquella época y allí estuve yo. Recuerdo perfectamente la tarde de aquél miércoles, él como cada miércoles tenía comisión de cultura en el Colegio Notarial y le conocí a última hora. Se colocó detrás mio y obsevó como tecleaba la máquina de escribir, creo que en aquél momento no sé si escribía en inglés, alemán, o ruso,… ya que el oficial de la Notaria me indicó que no se podían “hacer moscas” (no escribir encima de una letra o hacer faltas mecanográficas…). Me enseñó mucho a pesar de que yo prácticamente no tenía conversaciones con él, pues era una simple mecanógrafa, lo dicho con mucho respeto que es lo que de él aprendí “tener respeto”. Al cabo de unos nueve años, ya en su NOTARIA y digo suya pues la montó a su gusto y con muchas comodidades, me hizo su secretaria y como le gustaba escribir muchas cartas y escritos, un dia me colocó una MÁQUINA ELÉCTRICA,… creo que la tuve dos días, le dije “Don Joaquín, esto es muy complicado para mí…. y me dijo que continuara con la manual. Sí recuerdo todo el montaje en aquellos años del sistema informático, fue un pionero.
    En fin, no quiero alargarme mas, si recuerdo a Joaquín, José Manuel y Cristina llegando del Colegio y corriendo venían al despacho de “papá”. Y Doña Loli, que en una ocasión posterior a la muerte de Don Joaquín tuve la oportunidad de hablar con ella y me comentó lo que me apreció Don Joaquín, pero yo le expliqué que por circunstancias ajenas a mí, pues era muy joven y se puede decir que casi no entendía lo que ocurría, me marché de aquélla Notaria. Hoy después de 44 años continúo trabajando en Notaria, no he hecho otra cosa en mi vida, de lo que estoy muy satisfecha, aunque los tiempos han cambiado.
    Doña Loli, Joaquín, José Manuel, Cristina, les recuerdo con afecto a Vdes. y a Don Joaquín.
    Un abrazo

    Josefina

  3. Loli de Prada dice:

    Estimada Josefina:
    Gracias por su comentario en mi blog al que alegra que usted haya llegado aunque ignoro (y tengo curiosidad) porque vía lo ha encontrado.
    Efectivamente, mi marido era y sigue siendo para mí la persona más maravillosa del mundo y no porque fuera notario, ni mucho menos, pues yo lo conocí en Cartagena cuando él fue de alférez para hacer la milicia universitaria. Yo me enamoré de él nada más verlo y a él le pasó lo mismo. De eso que cuento ha pasado más de medio siglo, y yo sigo viviendo en ese día que fue el 1 de abril de 1956.
    Si, efectivamente fue el primer notario que se informatizó, y, en una ocasión me dijo también que de no haberse marchado usted la habría hecho oficial en la notaría. Usted tendría sus razones en su día para marcharse, me imagino. Tristemente la vida y las circunstancias, a mi marido, Joaquin de Prada, no le quisieron ayudar. Él era bueno e inteligente, un marido perfecto y un padre de familia ejemplar. Mis tres hijos son una maravilla y nos queremos mucho.
    Yo tampoco quiero extenderme más. Gracias por todo.
    Loli de Prada

  4. Josefina dice:

    Doña Loli,
    De nuevo me pongo en contacto con Vd. y con relación a su pregunta de como he llegado a Vdes. es muy curioso, me explico: Casualmente -mi marido- José María Caire al que Vd. recordará perfectamente y que fue la persona que me colocó en la Notaria de Don Joaquín, buscando en el ordenador hace unos días notificas sobre notarios conocidos, encontró su libro, y así fue como al comentármelo él, consideré oportuno recordar a Don Joaquín a través de Vdes.
    No sé se Vd. sabía que me casé con él en el año 2004, la vida a veces nos sorprende con estas cosas, jamás pensé que me casaría y mucho menos con él que por cierto me dice que le envíe un cariñoso recuerdo. Muchas veces hablamos de Don Joaquín y de anécdotas que vivimos en la Notaria en aquella época.

    Un abrazo,

    Josefina

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